Cómo acertar en la compra de tu sofá

Aunque parezca imposible, equivocarse a la hora de comprar un sofá es algo que puede pasar, y muchas familias e individuos pueden ser testigos de esto.

Un sofá es, sin duda alguna, uno de los muebles más importantes que todo hogar debería tener. Este cumple muchas funciones: como una cama para las visitas, el lugar perfecto para pasar una tarde viendo películas, el primer lugar dónde llegas a descansar luego de un largo día en el trabajo y también para disfrutar tiempo en familia. Sin embargo, debido a la gran cantidad de usos que se le puede dar, comprar un sofá no es tarea fácil.

Aunque parezca imposible, equivocarse a la hora de comprar un sofá es algo que puede pasar, y muchas familias e individuos pueden ser testigos de esto. Por esta razón, es importante que te prepares antes de realizar una de las compras más importantes de tu casa o departamento. Si no estás seguro de cuáles son las características más importantes que debe tener tu sofá, o qué hay que tener en cuenta para que se acople a tu estancia, está guía te ayudará.

Consejos y aspectos a tener en cuenta para comprar un sofá

El primer consejo que podemos dar es: no te quedes con la primera opción. Incluso si crees que ya has encontrado el sofá perfecto para tu hogar, te invitamos a pensarlo dos veces. En muchos casos, uno empieza a notar los defectos únicamente luego de cierto tiempo de uso, como que la tela en realidad no es tan cómoda o que el sofá está muy grande para tu sala. Si quieres evitar esto, también puedes considerar otros aspectos para comprar un sofá

¿Cuántas personas lo usarán?

Aunque parezca algo muy obvio, en realidad existen muchas personas que olvidan considerar cuántas personas utilizarán este sofá a diario. Lo más recomendable es comprar un sofá que pueda dar lugar a todos los miembros, ya que es muy común que todos se reúnan en el salón en algún momento del día. Y si consideras que tu pequeña sala no puede dar lugar a un mueble tan grande, deberías considerar deshacerte de otros muebles menos importantes.

Busca equilibrio entre funcionalidad y estética

Aunque todos quisiéramos un salón que luzca como una estancia futurística o elegante, esto a veces significa sacrificar una gran parte de la comodidad. Por ejemplo, los sofás tipo Chester, aunque sumamente elegantes, se caracterizan por tener brazos y espaldares muy bajos. A la larga, podría ocasionar dolores de espalda y cuello.  Si este no es tu objetivo, pero aún quieres que tu sala se vea bien, mejor optar por comprar un sofá cómodo pero bonito.

No te olvides de la decoración

Aunque comprar un sofá basándote únicamente en lo atractivo de sus colores es aceptable, te recordamos que un sofá mostaza definitivamente no quedará bien en una sala con paredes azules. Antes de elegir un sofá, debes considerar cual queda mejor con la decoración de tu sala, otros muebles y los colores de las paredes: ¿un color liso o un estampado? Si quieres darle vida a tu hogar, un mueble estampado podría ser una gran opción.

Sin embargo, este tipo de sofá suele cansar más rápido que los de color neutro, además de que no son recomendables si tu decoración ya cuenta con otros estampados en su diseño (a menos que quieras convertir tu salón en un museo contemporáneo). Una opción segura es comprar un sofá de color liso, que suelen brindar más elegancia y son fáciles de combinar. Sin embargo, siempre ten cuidado con el color que elijas.

El relleno forma parte de la comodidad

Aunque la tela y la costura son aspectos que definen la comodidad de un sofá, consideramos que el relleno es en realidad uno de los más importantes. Existen varios tipos de rellenos entre los que puedes elegir, siendo el de mayor calidad (y el más costoso) el relleno de plumas sintéticas, de ganso o de oca. Por otro lado, si buscas opciones más accesibles, también puedes optar por comprar un sofá relleno de espuma de poliuretano o viscoelástica.